El verano supone un periodo de pausa para muchos centros educativos: se interrumpen las clases, el equipo coge vacaciones y, en muchos casos, el centro se cierra. Por ello, son bastantes los que todavía deciden parar sus campañas de marketing.
De manera paradójica, las convocatorias de septiembre y octubre suelen ser las más fuertes y son muchos los que se llevan las manos a la cabeza porque, cuando reabren para el inicio de curso, tienen muy poco margen para captar antes de inicio de convocatoria y, por si fuera poco, los leads llegan con cuentagotas. Muchos de nuestros clientes ya nunca paran las campañas en julio y agosto. ¿Cuál es el motivo? Te lo explicamos:
Parar implica volver casi a la casilla de salida
Cuando pausas una campaña de Google Ads o Social Ads durante un tiempo prolongado, reactivarla supone que prácticamente arranque de 0. Las plataformas de Ads funcionan con una tecnología llamada machine learning, es decir, que recopilan continuamente datos de sus usuarios: al pararla, las plataformas dejan de obtener datos y, los que hay, se considera que quedan desfasados. Así que, cuando se activan de nuevo, vuelven a la fase de aprendizaje. ¿Qué significa esto? Que tu cuenta habrá perdido el impulso fruto de la optimización de varios meses o incluso un año entero.
Aunque decidas compensarlo con un impulso en tu inversión de septiembre, sentimos decirte que la plataforma no funciona así: necesitará un periodo de readaptación para funcionar de manera óptima y el volumen de leads será reducido. Es probable que tardes más de un mes en recuperar el ritmo de recepción de leads que tenías.
Si estás pensando en jugar con una reducción de presupuesto, también debes tener cuidado: un cambio brusco tiene consecuencias muy parecidas a las de parar campaña. Si es la opción que estás considerando, es básico trazar un plan para disminuir gradualmente la inversión y volver a subirlo con margen suficiente para que, cuando llegue septiembre, funcione a pleno rendimiento.
Los leads no desaparecen: solo descienden
Cada vez son más las personas que siguen buscando productos o servicios en vacaciones y también quienes optan por coger vacaciones fuera de la temporada más alta. Además, si estás llevando a cabo campañas de Latam, julio y agosto no tienen un comportamiento de baja captación como sucede en España.
De nada sirve recibir leads si no los atiendes
Tan malo es parar las campañas como dejarlas activas y no llamar a los leads pensando que así en septiembre tendrás muchos para llamar. Para cuando quieras contactarlos, muchos habrán escogido otras opciones y habrás invertido para captarlos sin resultado. ¡El seguimiento comercial es clave! Para evitar esta situación, alterna las vacaciones de tus asesores académicos para que siempre haya alguien disponible.
¿Cuánto tardan tus potenciales alumnos en decidirse?
Cuanto más valor, más coste y más duración tiene una formación, más le cuesta al potencial alumno tomar una decisión. Y, si es tu caso, esto implica que deberás tener tus leads trabajados y no podrás depender de los que recibas en septiembre para cerrar convocatoria. Analiza con tu equipo de asesores cómo de largo es el ciclo de vida de tu potencial alumno hasta que decide matricularse. El número de convocatorias anuales que ofrezcas también es decisivo. Si, por ejemplo, tienes una en septiembre y otra en noviembre, siempre puedes convencer a los alumnos para matricularse en la siguiente. Si están demasiado separadas, es bastante plausible que se decanten por otra alternativa formativa.
¿Qué hace tu competencia?
A la hora de parar, revisa qué están haciendo tus competidores. Si tú paras y ellos no, además de seguir captando y estar en el «top of mind» de sus futuros alumnos en verano, continúan optimizando sus cuentas y, al llegar septiembre, tienen los deberes hechos y la cuenta optimizada para captar al máximo mientras que, aquellos han desaparecido en julio y agosto llegan sin leads y sin impulso.
Anunciarse es más barato en verano
Las plataformas de Paid Media fijan sus precios por clic en función de la cantidad de anunciantes que pujan por una palabra clave o una segmentación concreta. Por ello, en periodos como septiembre o navidad aumentan pero en verano, en cambio, bajan: con el mismo presupuesto o menos, tendrás más visibilidad.
Pausar tus campañas en julio y agosto puede parecer una solución lógica de primeras: te ahorras el presupuesto de uno o dos meses y en septiembre lo reinviertes (o no). Pero, a la hora de la verdad, parar Google y Social Ads tiene como consecuencia que te quedes parado cuando más impulso necesitas en tu captación.
¿Quieres que te ayudemos a mejorar el rendimiento en tus campañas de Google y Social Ads? Contáctanos.